El Reino Unido no seguirá el ejemplo de la UE y exigirá a los fabricantes de teléfonos inteligentes, incluido Apple, que incluyan un cable de carga común en sus productos.
A principios de esta semana, los legisladores europeos confirmaron que la mayoría de los tipos de productos electrónicos de consumo tendrían que incluir un puerto USB tipo C, citando cantidades significativas de desechos electrónicos causados por cargadores sin usar y las molestias que sufren los usuarios de Android y iPhone que necesitan diferentes cables para diferentes dispositivos.
Las reglas cubren teléfonos inteligentes, tabletas, lectores electrónicos, auriculares, cámaras digitales, auriculares y auriculares, consolas de videojuegos portátiles y parlantes portátiles, mientras que las computadoras portátiles deberán adaptarse dentro de los 40 meses posteriores a la entrada en vigencia de las reglas. La carga inalámbrica no está cubierta, pero podría agregarse en una fecha posterior.
Finalmente, ¿un dividendo del Brexit?
La UE dice que sus nuevas regulaciones beneficiarán a los consumidores, les ahorrarán 250 millones de euros al año y evitarán 11.000 toneladas de desechos electrónicos.
Sin embargo, el gobierno del Reino Unido, quizás desesperado por enfatizar que el Reino Unido está libre de la supuesta “burocracia” de Bruselas en un mundo posterior al Brexit, ha dicho que “actualmente no está considerando” hacer lo mismo. A pesar de esta postura, es probable que los consumidores británicos se vean afectados.
Según los términos del acuerdo de retirada de la UE, las regulaciones se aplicarían a Irlanda del Norte. Mientras tanto, los fabricantes tendrán que adaptar sus diseños o lanzar modelos especiales para el mercado europeo para cumplir con las regulaciones. En cualquier escenario, estos dispositivos podrían almacenarse en los estantes británicos.
Los críticos de las reglas de la UE argumentan que sofocarán la innovación. Apple, que se verá afectada de manera desproporcionada por la política debido a su interfaz patentada Lightning. Apple se ha opuesto persistentemente a cualquier mandato, argumentando que generaría una gran cantidad de desechos electrónicos a medida que los consumidores se deshagan de sus viejos cargadores Lightning.
Vía BBC (se abre en una pestaña nueva)